Mensaje
por ClaJor3000 » 11 Jul 2003, 23:48
<center>El poema se basa en la cosmogonía Maya
y en nuestro amor, por supuesto!!!! He aquí su explicación </center>
[align=justify]En la cosmogonía maya, el cosmos es observado en los movimientos de los astros, movimiento que supone un espacio de traslación y movimiento que necesita un tiempo para trasladarse de un punto a otro, fueron parte (y aún lo son) del conocimiento del mundo, tanto físico como inmaterial (abstracto). Sin embargo, esta visión del mundo fue complemento de la relación de la convivencia del hombre maya con la naturaleza y sus semejantes, todos entendidos como parte del universo, formando un todo indivisible. A su vez, todos ellos se entienden unidos por un elemento esencial: la energía. La energía que nace desde lo material, la energía del fuego, del agua, del trueno, de la vida de los seres y plantas y la energía de los astros y asteroides, la energía de la luna en sus fases que influyen la tierra y a los seres vivientes en la tierra. Pero también por la energía inmaterial, aquella producida por los sentimientos humanos y comportamientos existentes en los instintos de los animales. El amor, por lo tanto es una energía positiva, mientras que el odio, como contraposición constituye su fuerza negativa. La energía entendida en sus opuestos: positiva o negativa. Los dioses mismos poseían ambas características, tener energía positiva y negativa. La energía positiva de la lluvia suave que alimentaba los surcos. O la energía negativa de la lluvia producida por el huracán que destruye. La energía en el calor del sol con su tiempo adecuado permite el crecimiento de las plantas o su contrario, la energía en el calor del sol extremo y en tiempos prolongados, produce las sequías que destruyen a las plantas y a los seres en general.
Pero además los Mayas se explicaron el espacio infinito (cosmos), con la observación del movimiento de los astros y la materia, por su ubicación en el espacio que ocupan, su trayectoria y el tiempo necesario en recorrer esa trayectoria. El movimiento de un astro que ocupa un espacio sucesivo, medido en días (kines) a partir de su observación por generaciones. Con ayuda de la observación astronómica y el auxilio de las matemáticas construyeron el calendario mas exacto de la humanidad.
Las matemáticas mayas construidas en esa cosmovisión la basaron en un sistema vigesimal, definiendo el numero 20 como numero base, subdividido en cuatro rayas y el cero identificado como semilla, o un caracol. Simbólicamente la raya es el surco de la siembra, como también el surco significa la trayectoria (camino) del movimiento de las estrellas. Mientras el cero, no significa la nada, sino significa el concepto: nacimiento, o punto de partida. Las matemáticas basadas en el sistema vigesimal, permitieron acceder a cantidades numéricas que facilitaron el establecimiento de grandes cantidades para medir precisamente las dimensiones astronómicas derivadas del movimiento de los astros y su correspondientes medición de tiempos. Y el número veinte como base, pudo constituirse como resultado de contarse los dedos de las manos y los pies. [/align]