En un ameno lugar entre dos tiempos,
vivo dichoso en jardines de ilusión,
y en cada sueño puedo perderme entre las rosas,
que son el sol de tu hermoso corazón.
En una nota que vibra entre compaces,
puedo ir sonando en arpegios del amor,
y simplemente brillar como elogiando,
la primavera de risas y de flor.
Y en la mirada que encuentro en tus dos ojos,
soy como un cielo que esgrime su canción,
cuando me espongo y me pierdo entre tu vuelo,
y mis entrañas se nutren de pasión.




