los que lloran en silencio,
yo te llevo en mi alma como si fueras,
un sueño, sagradas son las horas que alimentan,
tu recuerdo cuando a solas en mi cuarto,
yo te veo y en ese viaje inalcanzable que se llama,
pensamiento, porque tu me has enseñado a quererte,
con los ojos, con el alma sin palabras y en Secreto.
