Luego de cuarenta años,
de hacer todo,
todo,
lo que permití los demás decidieran por mí.
Y, habiendo cumplido con creces dicho mandato,
bajo una tonta sumición,
corre ya,
mi tercer año de rebeldía.
Y pienso entonces,
ya es hora de recoger algún resultado propio,
un logro producto de tanto conflicto,
sin esconderme en
"el que dirán" o "qué opinarán".
¡Ya no echaré culpas a los otros!
¡Oh... voy por Vida
o sigo Sobreviviendo comodamente
escudada en los demás!
Y, me resisto a sobrevivir,
tengo claro
que mi vida
se alimenta
e impulsa con ilusiones,
una tras de otra.
Me dan fuerza,
alegría,
me generan afecto el dar
y por ende el recibir.
Me viene a la mente una frase tan bella
como cargada de agresividad:
"El que esté conmigo que me siga,
Y el que nó,
no se atreva a cruzarse en mi camino"
Cometí, un gran error.
Quizás el peor:
"No fui felíz".
Me quedé sin sueños,
Pues,
iré por la revancha.
Tengo claro lo que deseo:
Pasíon y Afecto.
Hoy me pongó firme a contagiar
mi pequeño mundo
de estas bellas sensaciones,
me sentaré
en un rinconcito a cultivar
y a recibir...
Ha llegado ese momento...
Y Dios sabe,
cuando me propongo algo
lo logro
porque valgo
y
puedo,
claro... además de MERECERLO.
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