
¿Te digo todo libre?
Deja que la crisálida
que aprisiona dolores
y es carcelera
de los sentimientos
en esa cárcel forjada
de médula y hueso
haga metamorfosis.
Que eclosione de la calavera
la tristeza que te aqueja
convertida en colorida mariposa.
Cada sensación
tiene en el hombre
el adecuado peso
de la piedra,
así como cada cosa
se corresponde con un nombre.
Vive la miel de aquellos besos
que hoy son
algodón de azúcar
en labios ajenos.
Porque reír es bello,
pero sufrir hace crecer,
y como humanos nos engrandece.
Permite que tu alma de poeta
amase con llanto
los reflejo pasados en el espejo,
que cada sensación que vivas,
por amarga o dulce que sea
se trepen a lo más alto de ti
como lo hace en el árbol
la enredadera,
¡Y que todos desde esa altura
te miren al mismo tiempo!
Sacude tú alma como un pañuelo
y que en el papel
las palabras caigan
enhebrando versos,
y como amor y desamor
son en tu corazón evidentes,
nombra en voz alta cada dolor
que a tu alma de poeta aqueja
para que viajen a todas partes,
y escribe de ellos un poema,
para verlos cual niños despiertos
correteando traviesos.
¡Que desanden como fantasmas
los sentimientos!
como un pichón de ave
que revienta y nace de un huevo,
déjalos crecer y que levanten vuelo…
Entonces serás libre,
y habrás crecido espiritualmente
cuando convertidos en pájaros
se hayan machado lejos.
Artemisa904
