DOLOR
Me dueles en lo más profundo de mi herida,
In misericordiosamente abierta a tus recuerdos;
Dolor que se acrecienta cuando me trae a la memoria,
Aquél beso furtivo que encendió nuestros locos anhelos.
Es un dolor sincero que se anida en el corazón vencido,
Es dolor de renunciarte y de contemplar tu olvido;
Es dolor que me atormenta por saber que me quieres,
Sin amarme, esperando en vano que me beses.
Yo, en mi afán por tenerte como ilusión en mi sendero,
Y de sentirme joven, en mis tiempos de otoño;
Olvidé que eres viajero que conoces de amores y de adiós,
Y que tu boca ha besado otros labios ávidos de deseos.
Es, en este esperar callado y sombrío,
Y en esta ansiedad de amar muriendo en agonía,
Que mi alma se hunde en profunda melancolía,
Al saber que no podré juntar nunca más, tu corazón con el mío.
Diana.
2002