Comprender...
Qué en silencio amordazo mis labios
para no nombrarte,
sangra mi piel de no sentir tus besos en mi boca.
Desde ayer...
he vaciado el alma para encontrarte,
decirte tantos "te amos"
Y llevarte al paraíso
que aún está abierto
al calor de nuestros versos.
Se despoja el sentimiento
de tristezas escondidas,
las huellas de mis pasos
más y más están perdidas...
Se unen mil promesas,
La cita aún inconclusa...
Peregrinando en el tiempo
el verbo de la vida...
Te busco en las estrellas
en magia de la noche,
palpitante la espera
que queda suspendida...
¡Callado juramento!
regresa estremecido,
arrullando los sueños
que por ti, se han detenido;
Años que se olvidaron,
dormidos en suspiros.
Y tú...
Invadiendo el recuerdo
anclado al pensamiento...
¡Aquí en mis nostalgias!
Allá en la distancia...
Son trozos de mis lágrimas
durmiendo en tu mirada.
Alma Cervantes
