

deja que me alimente
de la belleza de este cariño,
que me adueñe de tu cuerpo
otra vez.
Permíteme desnudar
en los más largos minutos
mi alma ante la tuya,
déjame cariño, impregnarme de ti.


mi amor en tus pupilas
enterrar mis días en tu vida,
arañar con ternura tus entrañas
y llegar a ser tu silencio,
tu tiempo, tu verdad.


mi calor y lo que soy
deja que mi piel y tu piel
se confundan otra vez.


sea miel que fortifique
el polen de la felicidad.


quiero que me habites toda
para ahogar este miedo
en la seguridad de tus brazos.


a esos momentos infinitos
y a esa gigantesca esperanza
que opaca el temor a perderte.


y agrandar el sentimiento
extendiendo nuestro tiempo
hasta la eternidad.

¡Déjame amor mío,
quererte un poco más!