<TABLE border="20" bgcolor="darkblue" width="100%"><TD><FONT size="4" color="white"><CENTER>
¿Habré de esperar mucho más?
El eco de tu voz aún retumba en mi oído
recordando cada nota de tu silencio perdido,
razones de más para querer tu olvido
soñando aún despierta con tu alma de niño.
Cuando estoy pensando a lo lejos mi amado,
en los días felices que pasé a tu lado,
llegan a mis ojos tan tristes a veces
la luz reflejada de cristales verdes.
Letras azules en fría pantalla
dejaron entre mis sueños de niña
diez mil alegrías contenidas.
Y convoco al ángel que me concedió
la dicha tan grande de saberte ahí...
muy lejos...infinitamente distante...
y al mismo tiempo tan dentro de mí.
El tiempo conspira a veces sin querer
cerrando tus heridas en un amanecer,
sin obligar al amor
a presenciar el ocaso rojo de tu sol.
Y yo...aquí...esperando siempre
a que tus ojos volteen a verme,
ave pequeña sin otro caudal
que amarte siempre hasta el final.
Porque mis manos están tan llenas de ternura
que solo esperaba una señal...
para descargar sobre tu cielo
el amor que me quema por dentro.
No la hubo...
te doy tu libertad
nada de sueños
ya...no más.
Avellaneda/Sept/2003
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Clareth y Jorge 
