Si ahora sumergida en el limite,
De mi angustia, me sumerjo,
En los pliegues de mi conciencia,
Yo he decidido marcar los límites
Para no matar mi alma, en huracán,
Arrasando mis huesos liberados,
Soy la costilla, tu costilla.
Liberados los sabuesos que me persiguen,
es hora de liberar mis miedos,
Y decirle a mi hombre que es el y solo el,
El reloj de arena que marca el compás
De mi cuerpo, marcados entrecejos
En la faz de la tierra. en la superficie de mi cuerpo
Aparece en el horizonte mi futuro,
y alzando las manos alcanzo a tocar
los sueños de mi amado.
Solo Dios sabe cuanto te amo
Ollas de barro del torno masilla,
Figura coqueta que forma la arcilla
Vasijas de porcelana guardan,
Con celo infinito los besos
Que me has dado, en tantos,
Momentos inolvidables
que tanto empeño puse en construir,
y te ha bastado un instante de duda
para resquebrajarlos en mil pedazos.
Quiero de nuevo abrazar las olas del
Mar aquel donde navega tu velero
para volver a saber lo que es vivir,
y al venir de nuevo a mis lazos,
comprenderé que las historia nunca,
nunca ha tenido un fin.
MAR Y CIELO
