
pequeños cantos de pájaros se dejan escuchar,
va desapareciendo la pereza, todo se ilumina
y lentamente se empieza a despertar.
La luna se despide con nostalgia
de un sol eterno que jamás podrá abrazar,
sus rayos tocan su cara y esperan
ese día en que ambos se podrán amar.
La noche da paso a un amanecer vivo
que guarda todos esos sueños secretos,
sueños que jmás se echaran al olvido
dormitan siempre en el pensamiento.
Llega el día con su estrenada rutina
naciendo todo en un suspiro lento,
te adornas de aromas de vida
te adentras por enexplorados senderos.
